Siempre que se utiliza internet, y se visita alguna página web, se accede a información y datos. Esta información contenida en cada sitio web debe ser alojada en algún sitio. Los servidores son el lugar físico donde esta información es almacenada, su función es la de proveer accesibilidad a dicha información, para habilitarla cada vez que se visita el sitio web.
Esto es lo que se denomina servicio de hosting, es el espacio físico de alojamiento de los sitios web. En la actualidad cada vez más organizaciones proveen sus servicios a través de páginas web, por lo tanto la demanda de servicios de hosting ha crecido notablemente. La competitividad del contexto actual hace que sea indispensable tener una presencia online, tanto para grandes y pequeñas organizaciones.
Abrirse al mundo a través de un sitio web
Internet ha acercado a las personas, el avance de la tecnología ha borrado las distancias, y ha hecho posible aumentar la visibilidad, poseer un sitio web es una forma de acceder al mundo. Las limitaciones de tiempos pasados han quedado atrás, ya no es necesario contar con una tienda física ubicada en una avenida principal para tener acceso a buen flujo de clientes. La virtualidad es una gran avenida principal, la competitividad sin embargo se juega a partir del gran acceso a oferta que poseen los usuarios. La velocidad y la eficacia en la ejecución del servicio son algunos de los factores más valorados por los clientes en la actualidad.
A través de un servicio de hosting se logra que un sitio web sea accesible a cada persona que desee visitarlo. Un servicio de hosting también tiene otras funciones como la posibilidad de gestionar direcciones de email personalizadas.
La oferta de servicios de hosting se puede encontrar a nivel global, sin embargo se recomienda, por razones de simplificación en los pagos y el registro, consultar servicios de hosting en Argentina, o del país donde se resida.
¿Cómo opera un servicio de hosting?
La función de un servicio de hosting es la de hacer accesible los sitios web que en él se alojan y así habilitar su acceso a cualquier usuario que quiera visitarlo. Toda la información que se observa en cualquier sitio web está alojada en los servidores que el servicio de hosting contratado provee.
Un servidor es un hardware, es decir un equipo físico de informática. Estos equipos se encuentran permanentemente conectados a la red, de esta manera garantizan la accesibilidad de las páginas que allí se alojan.
Lo que sucede al contratar o registrarse en un servicio de hosting es rentar una parte del espacio de almacenamiento en un servidor. Allí se guardará toda la información que compone dicho sitio web. Un servicio de hosting funciona de manera comparable a la “nube”, al igual que en esta, se requiere un abono por mes para poder asegurar que el sitio web cuente con ese espacio de almacenamiento, y así permanecer disponible a los usuarios.
Una de los aspectos a tener en cuenta al pensar en que servicio de hosting registrar el sitio, es la atención al cliente. Contar con una asistencia rápida y eficiente frente a cualquier problemática de acceso a la página web, favorecerá una reacción a tiempo, y evitará que el sitio deje de funcionar.
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