Un ciberataque de gran escala ha afectado a varios aeropuertos de toda Europa, este sábado 20 de septiembre, causando interrupciones en los vuelos, retrasos y caos para miles de pasajeros. Se sospecha de un grupo de hackers pro-rusos, aunque las autoridades no han confirmado esta información. La respuesta de los gobiernos y las empresas aéreas está siendo coordinada.
El ciberataque, que se produjo en la madrugada del sábado, se extendió rápidamente a los sistemas de control aéreo y de información de vuelos de varios aeropuertos importantes, incluyendo el de Frankfurt, el de París-Charles de Gaulle y el de Ámsterdam-Schiphol. El ataque provocó la caída de los sistemas de check-in, de las pantallas de información y de las bases de datos de pasajeros, obligando a las aerolíneas a procesar manualmente a los viajeros y causando largas filas y horas de espera.
Las autoridades aeroportuarias han activado protocolos de emergencia para restablecer la normalidad, aunque se prevé que las interrupciones continúen durante todo el fin de semana. Los expertos en ciberseguridad están trabajando para determinar el origen del ataque y las posibles vulnerabilidades explotadas.
Por su parte, la OTAN ha convocado una reunión de emergencia para analizar las implicaciones del ciberataque y coordinar una respuesta conjunta.
Y como antecedentes – En julio pasado, la aerolínea australiana Qantas fue blanco de piratas informáticos que lograron acceder a su base de datos de clientes. En diciembre de 2024, también fue atacada la compañía Japan Airlines.
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