Sam Altman, CEO de OpenAI, está cofundando una nueva startup llamada Merge Labs, un competidor directo de Neuralink de Elon Musk en la carrera por desarrollar interfaces cerebro-computadora, intensificando la rivalidad entre ambos titanes de la tecnología.
La ya acalorada rivalidad entre los magnates tecnológicos Sam Altman y Elon Musk ha encontrado un nuevo campo de batalla: las interfaces cerebro-computadora. Según informes del Financial Times, Sam Altman está cofundando una nueva startup llamada Merge Labs, que se posiciona como un rival directo de Neuralink de Elon Musk (Fuente The Finalcian Times).
El objetivo de Merge Labs es fusionar la inteligencia humana con la artificial, un concepto que Altman ha explorado en sus escritos desde 2017. La nueva compañía, que se encuentra en conversaciones para recaudar 850 millones de dólares, con una posible inversión de 250 millones por parte del brazo de capital de riesgo de OpenAI, no busca solo la rehabilitación médica, sino una integración más amplia de humanos y IA.
A diferencia del enfoque de Neuralink, que se centra en implantes cerebrales invasivos, Merge Labs se inclinará hacia interfaces menos invasivas, utilizando los avances recientes en inteligencia artificial para crear productos más útiles. Altman, aunque será cofundador, no se espera que participe en las operaciones diarias de la compañía.
El nombre «Merge Labs» proviene del concepto de «la fusión» (the merge), un momento en el que, según Altman, los humanos y las máquinas se unirán. La rivalidad entre Altman y Musk se ha vuelto cada vez más pública, con recientes enfrentamientos en redes sociales sobre acusaciones de monopolio en la App Store y manipulación de algoritmos. Neuralink, fundada por Musk en 2016, ha logrado importantes avances, recaudando 600 millones de dólares y alcanzando una valoración de 9 mil millones. Con la entrada de Merge Labs, la competencia en este campo de alta tecnología está destinada a intensificarse.
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