Microsoft ha anunciado un cambio significativo en sus operaciones, afirmando que ya no utilizará ingenieros con base en China para labores relacionadas con los sistemas de computación en la nube del Departamento de Defensa de Estados Unidos. Esta decisión surge tras una investigación que puso en evidencia las preocupaciones sobre la seguridad y el acceso a información sensible por parte de personal extranjero, marcando un paso crucial en la protección de la infraestructura crítica de EE. UU.
Un Cambio de Política por la Seguridad Nacional
La compañía Microsoft ha declarado que ha cesado el uso de ingenieros con base en China para dar soporte a los sistemas de computación en la nube del Departamento de Defensa (DoD) de EE. UU. Esta medida se produce después de que una investigación de ProPublica revelara la práctica de utilizar personal con sede en China, incluso si era supervisado por ciudadanos estadounidenses con autorizaciones de seguridad (Fuente Pro Publica).
La investigación de ProPublica detalló cómo Microsoft empleaba ingenieros en China para mantener los sistemas informáticos del Departamento de Defensa, con una supervisión mínima por parte del personal estadounidense. Esta situación generó preocupación sobre la vulnerabilidad de algunos de los datos más sensibles de la nación a posibles hackeos o espionaje por parte de China. El arreglo, crucial para que Microsoft obtuviera contratos con el gobierno federal hace una década, se basaba en ciudadanos estadounidenses con autorizaciones de seguridad que supervisaban el trabajo como una barrera contra el espionaje y el sabotaje.
La decisión de Microsoft llegó horas después de que el Secretario de Defensa, Pete Hegseth, anunciara que su agencia investigaría el uso de ingenieros extranjeros por parte de Microsoft para mantener los sistemas en la nube. Hegseth declaró en X que «a los ingenieros extranjeros —de cualquier país, incluido por supuesto China— NUNCA se les debe permitir mantener o acceder a los sistemas del DoD».
Aunque Microsoft defendió inicialmente su programa de «escoltas digitales», la presión pública y las preocupaciones de seguridad nacional llevaron a un rápido cambio de política. Frank Shaw, director de comunicaciones de Microsoft, confirmó la modificación: «En respuesta a las preocupaciones planteadas a principios de esta semana sobre ingenieros extranjeros supervisados por EE. UU., Microsoft ha realizado cambios en su soporte a clientes del gobierno de EE. UU. para asegurar que ningún equipo de ingeniería con base en China proporcione asistencia técnica para la nube gubernamental del DoD y servicios relacionados».
Este movimiento subraya la creciente tensión y las preocupaciones de seguridad cibernética entre Estados Unidos y China, especialmente en lo que respecta a la infraestructura crítica y los datos sensibles del gobierno.

