LibreOffice ha lanzado una fuerte acusación contra Microsoft, alegando que la compañía utiliza deliberadamente formatos de archivo «innecesariamente complejos» en Office 365. El objetivo, según LibreOffice, sería retener a los usuarios y limitar su «soberanía digital», dificultando la migración a otras suites de productividad y perpetuando la dependencia de sus herramientas.
La Complejidad de los Formatos XML como Barrera
La comunidad de código abierto, liderada por LibreOffice, ha intensificado sus críticas a las prácticas de Microsoft, centrándose esta vez en el formato XML de Office. LibreOffice acusa a Microsoft de hacer que su formato de archivo Office XML (OOXML) sea «artificialmente complejo» de manera intencional (Fuente XDA Developers).
El XML (eXtensible Markup Language) es un lenguaje que programas como Microsoft 365 y LibreOffice utilizan para estructurar y definir documentos. LibreOffice, por su parte, emplea el OpenDocument Format (ODF), un estándar abierto que no está controlado por ninguna empresa, resultando en archivos como .odt para texto y .ods para hojas de cálculo. Microsoft, en contraste, creó su propio Office Open XML (OOXML) para soportar todas las características de su software, dando lugar a los conocidos .docx y .xlsx.
La crítica de LibreOffice radica en que, si bien el XML debería funcionar como un «puente» para la comunicación e intercambio de datos entre diferentes aplicaciones, Microsoft está utilizando su propio esquema como un «arma». Al hacerlo tan «complejo, se convierte en una barrera en lugar de un puente». Esto, según LibreOffice, «limita la soberanía digital de los usuarios y perpetúa la dependencia a través de la complejidad artificial de los archivos».
Un ejemplo de esta complejidad, según se explica, incluye «una estructura profundamente anidada con convenciones de nombres no intuitivas y tantos elementos opcionales que implementar el formato se convierte en una pesadilla para cualquier desarrollador que no trabaje en Microsoft». LibreOffice compara esta situación con un sistema ferroviario donde las vías son públicas, pero el sistema de control de una compañía es tan complicado que nadie más puede construir un tren compatible, haciendo casi imposible la competencia. Los «pasajeros» (usuarios) no se dan cuenta de que están siendo rehenes de estos obstáculos técnicos.
Esta acusación se enmarca en un contexto de creciente debate sobre la interoperabilidad y la libertad del usuario en el ecosistema digital. LibreOffice continúa abogando por el uso de estándares abiertos que promuevan la competencia y eviten el bloqueo de usuarios a través de formatos propietarios y complejos.

